Capítulo seis.
-Feliz cumpleaños gorda- me despertó Holly.
-Feliz cumpleaños a tí tambien pesada- la dí un capón.
-Corre baja, hay tarta de chocholate-
Me metí en la ducha.
Solo me quedaban dos días para irme a Californía por fín, ya tenía ganas de irme a vivir allí, siempre hace calor, las playas son estupendas.
Pero cada día me daba más pena dejar aquí a Holly.
-Betty, buenos días-
-Hola enana-
-Felicidades-
-Gracias-
-¿Te puedo ayudar a elegir la ropa?-
-Claro enana.
Arianne me había elegido un pantalón corto verde, con una blusa fuscia, y unas sandalias de flores verdes y fuscias.
Me hize una cola alta, y me pinté un poco.
-Felicidades Betty-
-Gracias Amy-
Dios la tarta tenía una pinta estúpenda.
Nos cantaron el cumpleaños feliz, por fín eramos mayores de edad.
[DOS DÍAS DESPUÉS]
*Hey chipirón, todos los días sale el sol chipirón* - sonó mi despertador.
Eran las ocho y media de la mañana de un Sábado día 24 de Junio.
Tenía que prepararme me esperaba un largo viaje hacía Californía.
Me metí en la ducha como todas y cada una de las mañanas, hoy no me iba a poner estupendamente guapa,ni me iba a peinar como para salir de fiesta,me pondría lo más cómodo
hasta llegar a Californía.
Me puse unos leggins grises,con una camiseta blanca con la bandera de estados unidos y mis converse rojas.
Terminé de meter los últimos detalles en la mochila y las maletas.
Marío vendría a buscarme a las 10.
-Buenos días Ari-
-Buenos días-
-Hey princesa, no estes triste, prometo llamarte dos veces al mes-
-Tranquila, tú disfruta y llamame siempre que puedas ¿vale?-
Sé que Holly y Amy lo iban a pasar mál, pero Arianne, iba a ser la que más.
Aunque no entendía por qué, cuando la que lo tenía que pasar mal era Holly,que era mi hermana biologíca, pero bueno.
Ya eran las diez, y estaba sonando el timbre.
Allí estaban las tres con caras largas y medio llorando por que yo ya me iba.
-Bueno me voy, no me gustan las despedidas-
-Disfruta Betty-
-Lo haré Holly-
-Ten mucho cuidado cariño-
-Claro Amy-
-Echame de menos, y llamame el día de mi cumpleaños, que cumplo 15-
-Asi será pequeñaja-
-Te queremos mucho-
-Y yo-
Me limpié las lágrimas y me monté en el coche de Mario camino a cojer mi avión hacía mi paraiso.
Mario estaba callado, y eso en el era raro por que nunca dejaba de hablar.
Tenía una fachada de malote, de ser lo peor, y de ser un prepotente y un masca, pero en el fondo solo era una barrera para que nadie le hiciese daño,
después era el más tierno y el más romantico de todos, no podía decir que estaba enamorada de él, solamente teníamos una cierta atracción fisica, por mi parte.
Por la suya no lo sé.
Ya habíamos llegado y mi avión saldría en unos cinco minutos.
-Ya llaman a los de mi vuelo-
-Adiós pequeña, pasatelo genial-
-Gracias guapetón, te voy a echar de menos- digo abrazandole.
-Te quiero- me besa.
-Y yo-
Mientrás yo me iba, veía como se le caían las lágrimas.
El no paraba de darme con la mano, hasta que llegó el momento que le perdí de vista.
[10 HORAS MÁS TARDE]
-Señorita,señorita- me llamaban.
-¿sí?¿que pasa?-
-Ya hemos llegado-
-Gracias-
Que viejecita tan amable.
Bajé del avión, y respiré hondo
*POR FIN ESTOY EN CALIFORNÍA* - grité.
Todos me miraban asustados, nadie entendía mi idioma.
[Se suponía que tendría que hablar en inglés,pero no,JAJAJAJAJA]
Cojí mis maletas y pedí un Taxi.
-Buenos días-
-Hola señorita-
-¿Me puede usted llevar al parque 'Los Ángeles'?-
-Por supuesto-
LLegé a aquel parque, y había quedado al lado de la fuente con mis dos primas,Sandra y Carlota.
Iba mirando hacia todos lados, de un lado a otro, aquello era todo precioso
*PUM*- me choqué.
-Lo siento, enserio-
-No pasa nada,tranquila-
Aquel chico era precioso, no tenía palabras para describir lo que sentí en aquel momento.
Me removió hasta lo más dentro, cuando le ibas a dar las gracias por levantarme las maletas, él ya se había ido.
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