martes, 12 de febrero de 2013

Capitulo XIX




· Capitulo XIX

Tara cómo cada mañana apaga su despertado y se levanta de la cama de un impulso. Hoy vendrá el estudiante de intercambio, y dirán quien es el que se va de aquí. Está nerviosa, quizás es ella,quizás no.

Tara se mete en el cuarto de baño y mientras se quita la ropa deja que el agua comience a calentarse. Sólo son las ocho menos cuarto de la mañana y ya tiene mil y un pensamiento en su cabeza, no puede dejar de pensar ni de rayarse. Tienes ganas de ser ella para así poder ver a Justin, estarán en la misma ciudad. Lo que ella no sabe es que en un rincón de Nueva York su novio está cogiendo un avión para dirigirse hasta Atlanta dónde pasará su trimestre cómo becario. Es increíble, incluso irónico.

Tara se mete en la ducha y el agua comienza a caer por cada rincón de su cuerpo. A los dos minutos y medio sale de esta, y comienza a colocar su bandolera mientras se seca. Acto seguido Tara comienza a vestirse, pantalón pitillo vaquero oscuro, camiseta de manga corta básica negra y sus vans negras con los cordones amarillos al conjunto con su gorra. Está lista. Lista para comerse el mundo un día más a sonrisas.

· Narra Tara.

Mientras bajo las escaleras mi iphone comienza a vibrar. Cómo cada mañana supongo que será un mensaje suyo, y no me equivoco.

<<De estúpido>>

Te echo de menos. Quiero una dosis de tu besos ¡YA! Te amo pequeña. Por cierto, ¡BUENOS DÍAS, Idiota!.

<<Para estúpido>>

Te amo.

Cuatro toneladas de cemente encima mía. Su mensaje. Sus buenos días, aunque no son buenos días si no le tengo a él.
No sabe lo mucho que le echo de menos. Lo mucho que necesito su sonrisas. Lo mucho que necesito llegar a casa y que toda mi ropa huela a su colonia. Lo que necesito que me coma a besos. Lo que necesito sus ataques de cosquillas. Que me deje su sudadera cuándo hace frío. Que no me presione. Que esté ahí.
No sabe lo mucho que echo de menos salir de mi casa corriendo y encontrarmele a él, ahi sonriendo y sin camiseta y en pijama. Lo que echo de menos hacerme fotos con él en el espejo de su baño. Agarrarme de su mano cómo si no hubiese un mañana. Quedarme dormida con él y que me despierte cómo a una princesa. Sus besos en la frente. Sus buenos días cara a cara. Ponerse su gorras y que se enfade por que ami me queden mejor. Echo de menos decirle que le odio, echo de menos llamarle ''estúpido'' y que me sonrisa y me devuelva un ''idiota'' seguido de un beso. Que me coga al churchi y me de vueltas hasta que terminamos los dos en el suelo riendo. Que me cante al oído. Que me diga a cada segundo que pasamos juntos lo mucho que me quiere. 
No sabe que le necesito a él. Aquí, a mi lado y ahora.

Bajo las escaleras y aparco mi bandolera en la puerta y entro en la cocina. Son las ocho y cuarto, cogo dos tostadas y un zumo de brick y salgo camino al instituto. Hoy el director quiere vernos ami, a Mike, a Caroline y a Sarah en dirección antes de que empiecen las clases. ¿Que querrá?

· Narrador.

Tara sube las escaleras hasta dirección corriendo cómo si la vida se le fuese en ello, comiéndose a algunos niños de primero e incluso a gente de segundo de bachillerato cómo cada día llega tarde y lo peor de todo es que sus compañeros ya están metidos en el despacho. Esquiva dos niños mas y ya está allí.

LLama a la puerta con miedo de lo que pueda encontrarse, pero no es nada malo. Su hermano, su mejor amiga y Sarah la lista de la clase. 

-Señorita Weasly, llega tarde y su hermano lleva aquí cinco minutos.
- Lo siento Señor Parker.
-Tome asiento.

El director les empieza a contar los planes del intercambio y que ellos cuatro son los elegidos. Que la cosa no ha sido fácil de elegir pero que tiene la elección echa y creen que es la correcta, y todas esas cosas que se suelen decir. Es algo subrealista, cómo si estuviesen en un concurso pues igual y se estuvieran ganando nada más y nada menos que miles de dólares. 
Después de una media hora de charla ya que llegarán tarde a la primera hora si llegan el director les informa de que el estudiante que se va de intercambio es Sarah, Sarah Hunson. 
Y que el estudiante de intercambio se quedará en su casa. En casa de Sarah.

En la otra parte de Atlanta está Justin con sus maletas esperando a que alguien valla a recogerle, y al fondo ve a una chica rubia de ojos verdes claros con aparto de dientes y unas curvas bastantes definidas. Es la hermana de Sarah, es Clarise Hunson.
Justin se monta en el coche con Clarise y está la deja delante de la puerta del colegio dándole todas las instrucciones para llegar hasta la sala del director, y le dice que a la salida espere a Sarah que le tendrá que acompañar a casa por lo mens hoy. Justin se baja del coche y emprende camino.

Tara está sentada en las escaleras de la cafetería. No tienes ganas de entrar a clase para media hora que queda, y mucho menos después de que el director le haya pisado el sueño de poder ver a su novio casi todos los días, y vivir durante nueve meses bajo el mismo espacio que él, es decir en la misma ciudad. Aunque a la vez Tara se siente bien por quedarse aquí, no soporta separarse tanto tiempo de Caroline, sin ella se siente un poco vacía. Es irónico, cómo la vida de Tara, es cómo una montaña rusa de sentimientos.

[...]

-¿Vamos a clase o qué?
-Sí, antes tengo que pasar por la taquilla a coger los libros de filosofía.
-Vale, vamos.
-Carol.
-Si, Tara
-¿Quien será el estudiante?El director nos ha dicho que es chico.
-Yo sólo espero que no esté bueno, que tengo novio.
-Que estúpida eres.

Y las dos amigas comienza a carcajear de camino a la taquilla 143. 
El camino es corto debido a que se lo están pasando viendo imaginandose cómo puede ser el nuevo compañero Newyorkino, y cada una hace una apuesta. Tara apuesta porque será feo, y Carol dice que estará bueno y que tiene el presentimiento de que va a ser rubio. Tara está asustada por que la mayoría de presentimientos de Carol, se termirnan cumpliendo.

Han llegado a la taquilla, y Tara saca sus libros, pero hay algo que la impide ver cómo cerrar su taquilla y comienza a gritar el nombre de su mejor amiga cómo una loca, aunque una ráfaga de aire le hace oler el olor de su novio, y piensa que es su hermano que se ha comprado nueva colonia.

-Mike, ¿puedes quitar tus manos de mis ojos? Llego tarde a clase.
Y no obtiene respuesta.
-Mike Weasly.
Y sigue sin obtener respuesta. Un beso en el pelo del desconocido.Y hace que un escalofrío recorra su cuerpo.
-Mikel Javier Weasly, ya.
-¿Es mi nuevo nombre?
Por fin obtiene respuesta. No puede ser verdad, ese no puede ser su novio.
-¿Quien eres?
Ahora Tara siente miedo.
-El estudiante de intercambio.
-¿Cómo te llamas?
-No se. Pero he venido en busca de mi novia.
-¿Cómo se llama?
-Weasly.
-¿Justin?
-Sí, el mismo.

Y Justin quita la mano de los ojos de Tara dándole un tierno beso en los labios y susurrandole un 'cuánto te he echado de menos'.
No hay palabras. Se abrazan.Se besan. Se miran. Se vuelven a abrazar y así hasta que el timbre interrumpe su momento, su reencuentro.

-¿Y ahora?
-Espera.

Tara se acerca hasta dónde está su mejor amiga y se despide de ella.

-¿Que?
-Escapemos. Te he echado mucho de menos, cómo para meterme ahora a dar filosofía.
-¿Tanto me necesitas?
-Espera, ¿tu ami no? Podemos quedarnos.
-¿A que esperas para irnos?
-Venga, vamos.

Cierra su taquilla dejando allí su bandolera y coge sólo lo necesario. El móvil y las llaves de su casa. Está feliz y sabe que lo que está haciendo es una locura y más en un segundo de bachillerato. Está arriesgando su nota para entrar en una carrera pero a Tara eso es lo que menos le importa.
Saca el móvil de su bolsillo y manda un mensaje a su madre.

<<Para mamá>>

Mamá, Justin es el estudiante de intercambio, me he ido de clase. Voy a pasar el día con el, ahorrate la bronca para cuando llegue. Hoy el día es perfecto, te quiero.

<<De mamá>>

Estas realmente loca pero yo habría echo lo mismo. Pasarlo bien pequeña, y ten cuidado.

Guarda el móvil en su bolsillo y sonríe. No sabe dónde va a ir, ni por qué. Solo sabe que está metida en un autobús de camino a no sabe dónde con el chico de su vida, con su novio. Con el que tanto ha echado de menos, y con el que va a compartir nueve meses escolares, e incluso vacaciones.

-No sabía que eras tan ''loca''
-No me conoces bien.
Y le roba un beso. Sí es cierto, necesitaba una dosis de ellos.
-Si que te conozco Weasly.
Ahora es él quien le roba un beso a ella. 
Última para del autobús. El parque de los ''patos''. Así es cómo lo ha denominado ella, porque hay patos y los ancianos les dan de comer. Algo lógico.

Se bajan del autobús entre beso y beso y se agarran la mano y comienza a andar hasta llegar a un banco. Tara se siente feliz, está con el después de tanta lágrima.

-Bieber, bieber.
-¿Si?
-Mucho decirme que me amas por mensaje pero aún no te has atrevido a decírmelo a la cara.
-Te quiero.
-Eso no es te amo.
-¿Tú me amas Weasly?
-Yo te amo, Bieber

Y Justin le roba un beso, y otro beso más y otro más. Y otro más, y ahora comienza a hacerle cosquillas, y cómo ella echaba de menos está montada encima de él dando vuelta hasta caer al suelo. Sonríe aunque por su cabeza sigue pasando el que aún no le haya dicho te amo.

-¿Bieber me amas?
-Sí.
-¿Si me amas?
-Sí.

Y Justin se levanta del césped de dónde acaba de caer y comienza a correr por todo el parque gritando 'Estoy enamorado de Tara Weasly, y la amo' y así hasta el último metro cuadrado de aquel parque.
Dónde después obtiene su recompensa con una de las sonrisas más sinceras de Tara y una dosis más de besos.
Ahora sí se puede decir que han pasado de odiarse, a amarse. 


viernes, 8 de febrero de 2013

· Capitulo XVIII



· Capitulo XVIII.


· Narra Tara.

Son las siete de la mañana y en mi radio ya suena Diamonds de la diosa Rihanna.Toda la casa está revoluciada.Hoy es el primer día de clase después de las vacaciones de verano.Ya le echo de menos, no sé cómo pude enamorarme de él después de tanto odiarle. Fue algo raro. Demasiado raro diria yo. Tan raro que sigo afirmando que me enamoré con odio.
Este es mi último año en el instituto, segundo de bachillerato. Estoy deseando acabar y poder irme a Nueva York a estudiar fotografía, y así poder pasar con el los trescientos sesenta y cinco años del año.

-Pequeña, ¿cómo lo llevas?
-Cada día se hace más duro.
-No estúpida, digo que cuánto te queda.
-Diez minutos.
-Te espero abajo.
-Vale Mike.

Mike odia madrugar más que cualquier persona del mundo, su cama es su vida. Mike sigue en el instituto debido a que ha repetido este año, y tendré que aguantarle en clase además de casa aunque eso es lo que menos me importa ahora. Este verano nuestra relación ha vuelto a mejorar, es un peso menos de encima.

· Narrador.

Tara se lecanta de la cama y se coloca sus vaqueros pitillos azules cielo, con su camiseta negra básica, en los pies sus vans negras con los cordones a conjunto con el pantón y la gorra azul de obey. Ama esa gorra. En realidad Tara ama todas las gorras que tiene en su estantería del armario. Ella dice que sus gorras la definen incluso más que su propia forma de vestir.
Se coloca dos orquillas en el flequillo y su largo pelo moreno suelto, pero está indecisa asi que al final se decanta por una coleta alta. Se coloca su fular de color azul y se echa un poco de base para disimular sus ojeras. Estos últimos días no apenas ha dormido. Echa de menos estar con él y saber que al día siguiente podrá verle.
Un poco de su colonia favorita, el móvil y el reloj a conjunto con la ropa que lleva puesta y ya está lista.

Ha tardado diez minutos tal cómo le ha dicho a su hermano mayor. Baja las escaleras sin ganas sabiendo que al final no estará el cómo los dos ultimos meses que pasó en Miami, pero le queda el consuelo de que al final estará Caroline que ahora mismo es su mayor apoyo a demás de su hermano mayor, Mike.

-Buenos días mamá.
-Buenos días, hija.
-¿Que tal has dormido?
-Se puede decir que podría haber dormido mejor.
-En un mes te habrás acostumbrado Tara.
-Supongo mamá.

Coge una tostada y con desgarvo le da un muerdo y le pega un suerbo al zumo de piña que la ha dejado su madre encima de la mesa. Mira el reloj y cómo cada año el primer día de clase llega con la hora pegada un poco al culo. Es rutina según ella.

-Mike vamos o llegaremos tarde cómo de costumbre.
-Ya voy.

Los dos hermanos despiden a su madre con dos dulces besos en las mejillas y salen de casa hablando de mil y un tema. Sobre todo lo mucho que echan de menos a sus respectivas parejas de este verano. Mike, está pillado de Kels aunque su fachada no permite reconocerlo, y Tara salta a la vista que está enamorada de cada milimetro del cuerpo de Justin, cada milimetro de él y de su interior. Se siente vacía sin él.

-Ya hemos llegado.
-No me apetece entrar mis ganas son mínimas, Mike.
-¿Crees que amí si? A tí por lo menos estará esperandote Caroline, pero amí una panda de estúpidos.
-Tu los elegistes, Mike.
-No, ellos llegaron amí cuando las cosas no estaban bien entre tu y yo.
-Mike, en el fondo te quieren, no pasan sin tí, creeme.
-Supongo. Yo tampoco paso sin ellos, son mis estúpidos ¿no?

· Narra Tara.

'Estúpido' y mi hermano vuelve a recalcar esa palabra durante dos veces más en las conversación. Mil y un recuerdo viene a mi cabeza siempre que alguien dice esa palabra, siempre que alguien se dirigue amí de esa manera. 
Le echo tanto de menos. Echo de menos pasarme la tarde con él y llegar a casa oliendo a su colonia. Echo de menos montarme en esa moto que me despeinaba día a día. Echo de menos sus besos con sabor a menta. Sus abrazos interminables. Sus te quiero. Su sonrisa. Su mensaje de buenos días. Dormir con el a la luz de la luna. Las tardes de foto. Sus ganas de comerme a besos. Sus estúpidas sorpresas. Echo de menos que me llame idiota y poco después me robe un beso. Que me ''castigue'' cuando le vacilo haciendome cosquillas. Que me bese en la frente. Que me agarre de la mano. Echo de menos cuando salía a correr por la calle gritando 'Tara Weasly, te quiero'. Le echo de menos a él. Sus lunares incontables, echo de menos cada centimetro de su cuerpo. 

Es irónico nunca pensé que iba a echar de menos a alguien que me hizo la vida imposible durante el primer mes de verano. Es irónico que al final el terminase enamorado de mí y yo haya terminado más o menos igual. Es irónica la vida que me separa de lo que más necesito ahora mismo y me apega a lo que mas odio, es irónico echar de menos lo que un día echastes de más en tu vida. En sí, la vida es irónica. 

-¿Tara, me estabas escuchando?
-Sinceramente, no.
-Venga vamos para adentro.
-Si no queda más remedio, Mike.

Y me abraza. Me trasmite fuerzas y con ese abrazo me quiere decir, ''venga enana, que tú puedes con todo y con más''. 

· Narrador.

Tara y Mike después de un suspiro suben las escaleras hasta la puerta principal. Se sienten orgullosos porque es el primer día de clase y no han llegado cinco minutos antes. Aquello es una locura, la gente novata corre de un lado a otro buscando su clase. Por los pasillos puedes encontrarte con jóvenes comiendose a besos, amigos reencontrandose después de un largo verano, a lo que creeían que venia con la hora pegada al culo desayunando en la cafetería, a los profesores correr hasta la sala para tener su primera reunión cómo claustro, a los friquis enseñandose sus nuevos aparatos técnologicos, a la animadoras colocandose su traje, y a los chicos normales cómo somos Tara y Mike buscando a sus amigos correspondientes.

Al fondo está Caroline. La mejor amiga de Tara. Caroline no es muy alta pero tampoco es baja, tiene el pelo castaño un poco más abajo de la altura de los hombros, utiliza gafas de ver de tono gris oscuro, y su cuerpo es más o menos cómo el de una chica de diecisiete años. 
Tara y Caroline son dos personas completamente distintas. Dos personas con pensamientos contradictorios, sólo las une una cosa la música. Y haciendo música es cómo se conocieron cuando tenían siete años. En el coservatorio.
Desde aquel día son uña y carne, y dos en una.

-Mike, me voy que ya he encontrado a Carol.
-Vale pequeña.
-¿Nos vemos en el recreo?
-Sí.
-Te quiero.
-Y yo.

Y se despiden con dos dulces besos.
Todas las miradas están puestos en ellos. Todo el instituto sabía que Mike y Tara se ''odiaban'' y nadie entiende que ha pasado ahora. Muchos de los que están allí piensan ''Lo que hacen el verano'' y realmente razón nos les falta. El verano puede cambiar a una persona fisicamente pero también psicologicamente.

Tara corre pasillo alante hasta llegar a su mejor amiga. En realidad no está bien por que aún no ha recibido ningun mensaje de él, y eso la asusta, Justin también empieza hoy las clases pero ella ahora sólo piensa en llegar a su mejor amiga y comersela a besos después de haber estado tres meses sin verla, creo que tienen demasiadas cosas que contarse, aunque eso es obvio.

-Carol,carol.
Tara grita desesperadamente y aún le faltan unos veinte metros para llegar hasta ella. Su amiga se gira repentinamente y comieza a correr ella también.
Se funde en un sincero abrazo. Realmente se han echado mucho de menos.
-Estas 
-Estas
-Habla tú primero
-No tú.
-Venga Tara.
-Venga.
-¿Estoy?
-Preciosa tía.
Y coge a su amiga y la da una vuelta sobre sí misma.
-Tú no te quedas atrás, aunque sigues sin quitarte esa gorra.
-Dejemos el tema.
-Dios tía, enserio estás cambiada.
-Ya sabes, el verano cambia a la gente.
-¿Tanto?
-Estúpida.

Y siguen hablando hasta que llegan a su aula. Sin dudarlo Tara y Carol se sentarán juntas en clase cómo todos y cada uno de los años de su amitad.
''Aula 216, 2 de bachillerato A''. Todos los años la misma Aula, y todos los años la misma clase con la misma gente. 

Cuándo el timbre está apunto de sonar y Carol no se ha callado ni un momento desde que se ha encontrado con Tara el móvil de esta suena, es un mensaje de su chico, un mensaje de su estúpido.

<<De estúpido>>

¡Buenos días, princesa! Pasa un buen día y sobre todo que sea leve. Te echo mucho de menos, después de comer te llamo. Te amo. 

<<Para estúpido>>

¿¡Buenos días!? Creo que es algo irónico que me digas eso cuándo es el primer día de clase, me he dado un madrugón de tres pares de narices y te tengo a kilómetros. Tú también pasa un buen día, idiota. Esperaré tu llamada, no me falles. Te quiero mucho.

Y ahí termina la conversación. Tara está segura de que Justin habrá sonreído al leer su mensaje, al igual que lo ha echo ella al ver su mensaje de buenos días cómo todas y cada una de las mañanas. El timbre saca a Tara de sus pensamientos ''primer día de clase, allá vamos'' piensa ella.

[...]

El día ha pasado, y ha sido bastante ameno. En realidad no han echo nada debido a que la mitad de la clase aún no tiene los libros. No todo han sido malas noticias, habrá un intercambio con otros insitutos de los estados unidos, aún no sabemos que instituto serán pero seguro que uno de Nueva York cae seguro.

Tara no puede parar de pensar en que quizás el instituto de Justin esté dentro del intercambio y si es así solo desea que sea él el que venga desde allí, y ella no tenga que irse. El intercambio será durante los nueve meses de clases, excepcto vacaciones, en vacaciones cada alumno volverá a su casa y cuando empiezen las clases volverán a su instituto correspondiente de intercambio. Por eso, ella sólo espera que si es ella la que se va, no sea Justin el que venga, por que si es así, algo tiene seguro, tiene seguro que renunciaría a esa beca.

-¿En qué piensas Tara?
-En Justin.
-Siempre piensas en él.
-Carol, no lo entiendes.
-Ajá, si que lo entiendo. Ya sabes que yo cada día pienso en tu hermano.
-Carol.
-¿Qué?
-Eres una mentirosa. Sé que has ligado este verano.
-¿Sí?
Y las dos amigas comienzan a carcajear.
-Con mi novio, que por cierto viene por allí.

Tara se queda boquiabierta. Su mejor amiga está saliendo con Jason Evans. El pivón del instituto. No entiende nada. Su cara ahora mismo es un completo poema, y sólo piensa en que es una perra.

-¿Cómo?¿Cuándo?¿Por qué?
-Como es dificil de explicar, cuándo este verano y porque llevaba detrás mía un montón de tiempo Tara, tía.
-Dios, cómo me alegro. 
-Y tú vete a casa anda, seguro que tu hombre te llamará en nada.
-Gracias, eres la mejor.
-¿Nos vemos mañana?
-Obvio. Es sábado. Ya sabes estos cabrones y sus costumbre de empezar las clases un viernes.
-Tara, tu y tus indignaciones.
-Nos vemos cerebrito.
-Hasta mañana amante del monopatín.
-Te quiero mucho.
-Y yo Weasly.

Y pam 'Weasly' algo más que hace que todo le recuerde a él.
Nadie se imagina lo mucho que le necesita. Desde que se separaron siente cómo si le faltase el aire, o incluso el equilibrio cada vez que anda. Siente que las horas se hacen enternas, que los días no tienen sentido y cree que sonreír no merece la pena si él no puede verla. 
Desde que el no está a su lado cree que los abrazos no son sinceros, que los besos no saben ni trasmiten nada y que los te quiero quizás sean falsos. 
Siente que necesita que paren el mundo. Siente que necesita salir corriendo hasta él, en conclusión siente que le necesita a él para poder seguir viviendo.

[...]

Tara ya ha llegado a casa y para colmo la comida favorita de Justin está encima de su mesa, espagettis con nata y bacon ¿algo más? 
Se sienta en la mesa de mala gana, y sin a penas ganas se come aquel plato de espagettis si pronunciar palabra. Cuándo acaba, recoge su mochila del suelo y coge una manzana, acto seguido sube las escaleras.

-Mike.
-¿Si Tara?
-¿Dónde está mama?
-Ha dejado una nota que se iba a trabajar y que no volvia hasta la noche, igual que papá.
-Vale.
-Me voy a cambiar he quedado con estos para ir al cine.
-Yo me pondré el pijama, ya sabes mi nueva vida.
-¿Y Carol?
-Ha quedado con su novio.
-¿Su novio?
-Ajá, Jason Evans, nada más y nada menos.
-Ya era hora de que encotrase a alguien.
-Tú la rechazastes.
-Y no sabes cómo me arrepentí.
-Siempre has estado a tiempo de volver.
-Si no lo hize fue por tí.
-¿Cómo?
-Sé que si empezaba con ella te alejarías de tu mejor amiga, y no quería eso.
-Cómo le cuentes esto a Carol, me matará y me dejará de hablar se creería que es mi culpa.
-No lo haré, pero lo es.
-No Mike, yo madura y adulta y si su felicidad eras tú yo sabría comprenderlo.
-Lo siento.
-Adiós Mike.

Estás son las cosas que Tara odia de Mike, que le eche en cara que no hizo cosas por ella. 
Tara está descolocando su mochila cuándo empieza a sonar 'Domino' de Jessie J en su móvil, sabe que es el y corre a cogerlo.

-Idiota.
-Estúpido.
-¿Que tal el día?
-Me podría haber ido mejor ¿tú?
-Genial.
-Me alegro.
En realidad no se alegra. ¿Genial? Significa que no la ha echado de menos, que no ha pensado en ella, o eso es lo que ella cree.
-¿Y no sales?Es viernes.
-No, Carol ha quedado con su novio.
-¿Y tú?
-Debido a que mi novio está a kilometros no he podido quedar con él.
-Ajá, ¿y tú has quedado con tu novia?
-No, he quedado con mis amigos. Mi novia también está a kilometros de mí.
-Cómo te entiendo. Pásalo bien con tus amigos.
-Lo haré, aunque te echaré de menos.
-Eso espero.

Y le cuelga.
Sabe que se está comportando cómo una niña pequeña, y entiende que Justin tenga más vida a demás de ella, que ella está a kilometros. Está asustada y ahora más que nunca tiene miedo de perderle.
En Nueva York Justin está preparando su maleta y lo que Tara no sabe que ha quedado con sus amigos para despedirse de ellos, será el el estudiante de intercambio, será el quien se valla a su instituto durante los nueve meses escolares, sólo que pidió que nadie lo supiera que fuese sorpresa.
Lo que el no sabe es que quizás sea Tara la que se valla a su instituto, y el destino una vez más lo separe, todo estará por ver.

Tara coge el telefono y marca el número de Justin. Se siente mal.
Un tono, dos tontos, tres tono y por fín, al cuarto se lo coge.

-Me quedé sin batería.
-Que mal miente Weasly.
-Te echo tanto de menos, Bieber.
-Y yo, necesito una dosís de besos.
-Cuando te coga no te voy a soltar.
-Ni yo Weasly.
-Te amo.
-Y yo. Bebé, te tengo que dejar me están esperando estos. Te amo.
Nos vemos pronto.
-¿Cómo que nos vemos pronto?
-Te amo,te amo.

Y la cuelga.
Mil y un pensamientos pasan por la cabeza de Tara, pero nunca el de que Justin pueda ser el estudiante de intercambio.

sábado, 2 de febrero de 2013

· Capitulo XVII



· Capitulo XVII.

-Butler.
-Ah sí. Lo siento.
-No pasa nada.
-Tara, déjame hablar y no me cortes. Sé que hoy no es el día para decir estas cosas porque he tenido tres meses, pero no me he atrevido a decírtelo nunca, todo ha ido de buen rollo sin estas palabras de por medio, y sé que he sido un completo cabrón contigo, sé que no he tenido límites y que he sido demás de cabrón. Sólo quiero decirte antes de irme a Canadá, que lo siento por todo.
-Ryan.
-Es la primera vez que te escucho decir mi nombre desde hace un año y medio.
-Suena bien ¡eh! - carcajea Tara.
-Sí, demasiado bien.
-No te preocupes. Pasado pisado, ¿sí?
-Echo. Ahora me tengo que despedir, me espera un viaje largo.
-Cómo a todos, créeme. Nos pesa más el no volver a vernos en un tiempo, que las horas de viajes.
-Qué razón tiene. Espero que puedas seguir con Bieber, te quiere.
-Gracias Ryan. Cuídate ¿sí?
-Lo mismo.

Y Ryan sale de casa de Tara. Y ella siente que tiene que hacerlo, siente que tiene que abrazarle y decirle que le quiere, y que puede contar con ella para lo bueno y para lo malo.

-Hey, Ryan.
-¿Si?
-¿No me piensas dar un abrazo de despedida?
Y Ryan corre hacia ella, dándole un abrazo sincero. Ryan comienza a llorar, la echaba de menos.
-Te quiero Butler. Y recuerda que puedes contar conmigo.
-Lo mismo.

Y ahora sí. Tara ve cómo su amigo se aleja a lo lejos para coger camino hacia tierras Canadienses. Uno menos, sólo quedan ella y Justin.

[...]

Es la hora. Tara se acomoda su pelo y se coloca la gorra. Se echa un poco de colonia, y se repasa la raya del ojo y se echa un poco más de rímel. Coge las llaves, y el móvil. Lo necesario. No quiere más peso del que lleva ya. No por su cuerpo, si no por el dolor que tiene en el pecho de despedirse de él. Es lo que más le va a costar, además de la despedida con Alex.
Sólo tiene un pensamiento 'No llores, disfruta de las últimas horas'.
Por el otro lado está Justin, aunque cueste creerlo lleva llorando desde que Alex se ha pasado por su casa para despedirse. Esa morena de aparato le ha ayudado mucho estos meses, pero eso ahora no importa. Sólo importa que en menos de dos minutos, su novia esté llamando a su puerta para pasar la última tarde juntos.

-Hola idiota.
-Hola estúpida.
Y se besan. Un beso dulce pero apasionado, ambos piensan que quizás puede ser el último.
-¿Dónde vamos?
-¿Una de Starbucks?
-Sí.

Y Justin coge su chupa de cuero y sus llaves y cierra la puerta dejando su casa detrás de él.
Justin saca la moto del garaje, y Tara se sube con él, agarrándose fuerte a la cintura de este. Arrancan, dejando atrás el barrio. Su barrio. Y dirigiéndose hasta el centro comercial dónde pasarán la última tarde de sus veranos juntos.

[...]

Tras diez largos minutos ya han llegado. Justin aparca la moto, y agarrando de la mano a Tara la dirige hasta el centro comercial.

-¿Sabes que idiota?
-¿Qué estúpida? No leo las mentes, aún.
-Idiota.
-¿Que me iba a decir?
-Aún no tenemos ninguna foto juntos.
-Sí que tenemos Tara.
-¿Si?
-Sí.
-Bueno era una excusa, yo quería dedicar la tarde a hacernos fotos juntos. Ya sabes, cómo es la última.

-No pienses eso Tara. Vamos a tomar algo, y nos haremos fotos.
-¿Enserio?
-Sí.
-Te quiero.

Y se besan.
Se quieren pero no pueden estar juntos. El destino los une pero a la vez los separa. La vida juega con ellos cómo en un juego de azar, estás en lo más alto durante algunas partidas pero después ¡zas! lo pierdes todo y te quedas en el puesto más bajo.
Duele y hiere. Y lo peor es que esta herida tardará en cicatrizar.

Justin se acerca al mostrado y pide dos capuchinos con nata y caramelo. El café favorito de Tara, y con el que siempre se mancha y se deja un pequeño bigote blanco que produce demasiada risa a Justin, y eso a ella le encanta.
Ama verle sonreír pero más cuándo ella es el motivo. Cómo suelen decir, son cosas de enamorados.

Se sienta en la mesa junto al cristal. Desde ahí puedes ver a familias que vagan por el centro comercial de compras para la vuelta a la rutina, puedes ver a grupo de amigos que pasean por allí buscando algún hobby también ves a personas ancianas caminar y sentarse en un bar a tomarse algo, parejas de recién casados, y parejas jóvenes que se roban besos a cada tres pasos que dan. Parejas que no se separan porque viven en el mismo sitio, en el mismo lugar, bajo el mismo cielo, pero también bajo el mismo espacio. ¿Qué pasará con su relación? ¿Seguirán siendo uno?

-¿Vamos?
-¿Dónde?
-Al fin del mundo si tú quieres.
-Estúpido.
-Conozco un sitio perfecto dónde podemos ir.
-Te sigo.

Tara se monta en la moto de Justin, no sabe dónde va pero tampoco pone resistencia, se fía de él.
Tras diez minutos llegan al parque que hay detrás de sus casas. Un parque precioso, se bajan de la moto y juntos comienzan a correr por aquel césped de color verde chillón, y juntos se tiran en él.

-¿Por qué aquí?
-No sé, me gusta.
-Gracias.
-A ti, por existir.

Y comienza a echarse una foto tras de otra. En unas salen riendo, en otras salen besándose, en otras simplemente se miran, en otras salen haciendo el tonto, en otras corren, y en otras se muestran tristes porque ambos saben que está es la última tarde que pasarán juntos en Miami.

-Ala, ya son las siete y media.
-Contigo el tiempo se me pasa volando.
-Ojalá el tiempo fuese más despacio.
-Y ahora mismo estaríamos disfrutando juntos.
-El verano se ha esfumado.
-¿Sabes? Si pasa rápido es bueno, porque significa que te lo has pasado bien.
-En este caso es malo Justin, nos tendremos que separar.
-Créeme que no será por mucho tiempo, pequeña.
-Tomaré tu palabra.

Tara y Justin se abrazan. Lo tienen claro están hechos el uno para el otro. Aunque sus caminos se bifurquen y  se vean cada más pequeñitos, saben que estarán ahí el uno para el otro, y que ambos han prometido esperarse.

Es la hora. Son las nueve de la noche. Tara saldrá hacia Atlanta en una hora, y Justin también. Distintos destinos. Distinto aeropuertos. Distintas familias. Mismo sentimiento, nostalgia.

-Es la hora.
-Sí.
-Tara. Gracias, por estar ahí en los buenos momentos y en los malos, por aguantar tanto mis prepotencias cómo mis días de orgullo, por hacerme sonreír cuándo nadie más ha sido capaz, por tus abrazos, por tus besos, por tus te quiero, por tus ‘hasta el fin del mundo’, por ser cómo eres, por tu chulería.
Me has enseñado algo ¿sabes? Lo primero es que siempre en este mundo habrá alguien más chulo que tú, y lo segundo que las fachadas no son buenas. Gracias por poner mi vida patas arriba. Te amo Tara Weasly.
-Justin. No tengo palabras para ti, ya lo sabes todos. Día a día te he ido diciendo lo importante que eres para mí, y lo mucho que te quiero. No sé si podré vivir sin esos besos con sabor a menta. Sólo te pido una cosa, espérame. Te prometo que nadie ocupará tu lugar. Te echaré de menos Bieber.
-Te voy a esperar.
-Te quiero, mucho.

Y se besan. Enfrente de sus casas. Un beso sincero. Ellos están tristes y el cielo también. Comienza a llover. El otoño ha vuelto a Miami, y el invierno a sus corazones. Ambos se sienten fríos el uno, sin el otro.

[…]

Ya está todo listo en casa de los Weasly y de los Bieber. Las maletas están en los coches, la pequeña Jazzy está montada con Jaxon y Justin en el coche mientras Pattie y Jeremy terminan de colocar las últimas cosas y echan la llave a la casa.
Justo enfrente del coche de Justin está el de Tara. Ella ya se encuentra dentro mirando su cámara mientras derrama lágrimas, Mike que está a su lado la consuela con un triste abrazo. Ambos verán cómo se van de ahí, cómo se separan. Cómo dejaran de ser uno.
Los padres de Tara se montan en el coche siendo los últimos en despedirse de sus abuelos, los padres de Justin igual.
Tres,dos,uno..Ambos coche arrancan a la vez. Ahora sí, ahora ya no hay marcha atrás, dentro de nada uno estará en Nueva York, y otro en Atlanta.
Tara está en el avión cuando su móvil vibra de momento. Es un mensaje de él, es un mensaje de Justin.

<<De estúpido>>

Te he dejado un regalo en la maleta. Ayer mientras comías me colé en tu casa para dejarte algo que te recordase a mí. Y yo te cogí prestado un pañuelo, ese morado que tanto me gusta. Le llevaré siempre en la mano. No te olvides de mí, y espero que cumplas nuestra promesa. Hasta pronto, idiota.

<<Para estúpido>>

Estoy a diez minutos de mi casa. Cuándo llegue a casa te mando un mensaje ¿sí?
Confía en mí, lo cumpliré. Te quiero mucho, estúpido.


Y Tara por fin está en su casa. Sólo quiere ponerse sus cascos y dejar de pensar en todo por un momento, su cabeza va a estallar. No se lo puede creer, hace tan solo diez horas estaba abrazada a él, bajo aquel árbol, tumbadas en el césped verde del parque haciéndose mil y un fotos. Y ella se pregunta, ¿destino por qué eres tan hijo de puta?

Se levanta de la cama y abre la maleta corriendo. Y allí está el regalo, allí está la sudadera favorita de Justin, esa que el tanto adora. Y ahora es suya, está en su poder.

<<Para estúpido>>

Gracias. Me voy a dormir Justin. Pasa buena noche, sé que ya has llegado porque son las mismas horas. Hablamos mañana, te quiero mucho.

Y ahí termina su ‘relación’ veraniega. Y mañana empezará su rutina.
Una rutina, sin él.

viernes, 1 de febrero de 2013

· Capitulo XVI


· Capitulo XVI

Cómo cada mañana Tara se levanta de su cama, solo que hoy es un dia especial hoy es el último dia que pasará al lado de su novio, de su mejor amigo, de la persona que la ha dibujado todas esas sonrisas estos últimos meses.La persona que literalmente la a echo feliz. 
Hoy es un dia duro más duro que todos los demás. Hoy todo terminará, el verano acabará y con él su relación.

· Narra Tara.

El sol me está pegando en la cara de lleno, mi cara está caliente y juraría que también roja, empezamos bien el día. Me levanto de la cama y enciendo mi pequeña radio << I don't wanna miss thing >> de Aerosmith suena en la radio. Primer momento triste del día y todos los que me quedan. Cogo dos toallas limpias y entro al baño. Necesito despejarme, necesito relajarme antes de afrontarme al dia 'más' duro de mi vida, aunque seguro que los he tenido peores este está dentro del saco.

Enciendo el grifo de la ducha y dejo caer el agua mientrás se templa, al mismo tiempo yo me desprendo de mi pijama dejandole en el cesto de la ropa limpia que poco después mamá quitará. Es la rutina de siempre.
Entro en la ducha y dejo que el agua recaiga sobre mis hombros. Relajante.
Demasiado relajante. Ahora desde la ducha puedo escuchar cómo suena la canción de <<Let it be>> de The Beatles. Y de nuevo todos los momentos buenos golpean mi cabeza.
El primer beso, la primera discusión, el primer te quiero...

<<Flashback>>

-En esto también tenia razón Butler, tu gran caracter y tu tremendo tasero.
-Me das asco Bieber.
-Creeme terminarás amandome.
-Pierdete Bieber
-En tus sueños Weasly.

<<Fin del flashback>>.

No puedo evitar sonreír después de recordar aquel momento.Primer contacto visual, y primera conversación. Dos jóvenes desgradables. Me doy pena ahí misma amí, yo no soy así.. Justin es el único que hace que me ponga así de prepotente.
Y los recuerdos continuan.

<<Flashbach>>

-Intentemoslo.
-Creo que no va a salir nada bueno, somos dos chulos con dos ''cojones'' bien puestos Bieber.
-Weasly, si no arriesgas no ganas.
-Besame Bieber, pero hazlo ya. Quizás mañana me arrepienta.

<<Fin del flashback>>

<<Flashback>>

-Estas loco Justin.
-Loco por tí. Por tus besos y por tu holor a vainilla.
-¿Empezamos con un ''hasta que la distancia no separe''?
-No, empezamos con un para siempre Weasly.

<<Fin del flashback>>

<<Flashback>>

-Justin.
-¿Si?
-Te quiero, estúpido.
-Yo más, idiota.

<<Fin del flahback>>

<<Flashback>>

-Tara ¿sabes que?
-No soy adivina, ¿sabes?
-Estúpida.
-¿Que Justin?
-Desde que te conocí todo han sido continuos retos. A veces me da miedo pensar que contigo no me he superado a mi mismo..
-Justin, si tu reto era enamorarme, lo has conseguido. Me enamorastes con odio.
-Tú me has cambiado la vida, y me has cambiado amí.
-Tu, distes en mi vida todas las emociones que faltaban.
-Te echaré de menos.
-Creeme que yo a tí también.

<<Fin del flashback>>

<<Flashback>>

-Es raro Justin..
-¿El que?
-Antes de empezar a salir me dijistes que sólo me quería follar, y después de dos meses aun no he hemos echo nada, y me voy en dos días.
-Si, tienes razón. Una vez que empezé contigo no pensaba en eso, sólo pensaba en verte sonreír. No haberlo echo contigo es lo que menos me preocupa, ya tendremos tiempo.
-¿Y si no es así?
-Confia en mi pequeña, lo nuestro no terminará aquí.
-Te quiero.

<<Fin del flashback>>

Trescientos kilos de cemeto están encima mía. Las lágrimas de los ojos se me unen con el agua y no puedo notar la diferencia. Le voy a echar tanto de menos.
No sé que será de mi sin esos 'buenos días, estúpida' a través de papeles por las ventanas, o sin salir corriendo de mi habitación para encontrarme con él cada mañana, sin ese olor suyo a niño pequeño, sin sus besos de sabor menta, sin sus abrazos, sin su chulería, sin su fachada de malote cuando estamos todos juntos, sin sus te quiero, si sus 'quiero estar contigo el resto de mis días'.
No sé si podré sonreír sin que sea el el motivo, o no sé si podré vivir sin verle todos los días durante veinticuatro horas, no sé si podré mirar sus fotos sin derramar lágrimas, no sé si seré capaz de ser fuerte sin tenerle a él, o si seré capaz de levantarme cada mañana sin tener un motivo por el cual hacerlo.
Solo sé que le quiero, y que quiero estar con el resto de mis días..Que mi verano se resume en él, solamente en él, y también sé << que en esta vida, ya no quiero otros besos>>

Salgo de la ducha y de mis pensamientos, ni me habia coscado de que está sonando mi cancion favorita de Aerosmith <<Always>>.
Esta fue la primera canción que aprendí a tocar con la guitarra, y cómo acto reflejo descuelgo la guitarra y comienzo a tocar acordes a la misma vez que la radio lo hace, seguido de mi trozo preferido.

'' When I die you’ll be on my mind And I’ll love you always, always''. Y la canción termina ahí. 
Cogo mis vaqueros claros pitillos, y mis vans negras con los cordones verdes a juego. Mi camiseta verde de Mario Bross, y mi gorra obey. Todas mis gorras son obey. Esta es mi favorita, me la regaló Caroline cuando cumplí dieciseis años.
Y mi madre interrumpe mi sesión de guitarra.

-Tara, a comer.
-Mamá, no tengo mucha hambre.
-Tara, todo se supera en esta vida ¿sabes?. No puedes rendirte y dejar de luchar ahora, quizás todo esto no termina aquí.
-Hay kilometros de por medio.
-¿Enserio vas a dejar que un puñado de kilometros separe lo que el destino unió? Esta no es mi hija, la Tara que yo conozco lucha.
-Lucharé, pero hoy no tengo ganas.
-Venga baja a comer algo, la tarde será larga Tara.
-Y tanto mamá, y tanto.

[...]

El timbre de mi casa suena y por lo que noto que nadie abre la puerta estoy sóla en casa. Supongo que será Alex, ella se va hoy para su ciudad, ella vive en California. Todos estamos demasiado alejados los unos de los otros, pero esto no une, y creeme que Alex y no no dejaremos que los kilometros no separen.

-¿Tara?
-Ya va.
Y ahí está. Mi mejor amiga de 'vacaciones' desde que tengo tres años. Alex, Alexandra Payne.Loca, divertida y amiga de sus amigas. La que sufre de locuras, y la arquitecta de mis sonrísas. Nadie mejor que ella.
-Vengo a despedirme, ya sabes, en diez minutos me voy a California.
-Te voy a echar mucho de menos.
-Y yo a tí, bebé.
-¿Quedarás allí con Butler?
-¿En California?
-Sí.
-Llamadme.
-Prometido.
-Te espero en mis dieciocho.
-Prometido.
-Iré a verte pronto, te lo prometo.
-Te tomo la palabra. Y Llamame ¿vale?
-Haremos cómo cada año, cada mes llama una, empiezo yo.
-Te quiero mucho Tara Weasly.
-Yo más, Alexandra Payne.

Y ahí en aquel dulce y sincero abrazo no separamos dos almas gemelas que por culpa de la distancia no pueden estar juntas, pero siempre nos unirá algo. ''Miami''.

· Narrador.
Cuando Tara está cerrando la puerta su móvil comienza a vibrar, es un mensaje por el grupo de wa de las chicas. Son Roxana, Kelsey, Desirée, y Alex despidiendose.

*Conversación de wa de las 'Five for live'
-Roxana:
Chicas yo estoy de camino a Nueva York. He salido temprano y no quería despertaros.Gracias por este verano, tenemos que quedar pronto. Os voy a echar de menos. Os quiere, Roxx.
-Kelsey:
¡Aaaaamores míos! Yo también estoy de camino a California. Alex, ya te llamaré y quedaremos por allí algun dia tu, yo y Butler. Y a las demás nos vemos pronto, estoy de acuerdo con Roxx, tenemos que hacer una quedada todas. Os quiere mucho, Kels.
-Desirée:
Grandullonas, yo estoy ya para coger el avión de vuelta a España. Sé que conmigo no vais a poder quedar pero muchas gracias por este verano, yo ya echaba de menos que estuviesemos las cinco juntas. Sois increíbles.
Os quiere mucho, Desirée.
-Alex:
Trato echo Kels. Yo estoy montada en el cocha pasando por delante del skatepark, os podéis imaginar.Desirée, iremos a verte a España por eso no te preocupes, y a las demás espero veros pronto. Y a tí Tara, que te quiero mucho y esas cosas y que me esperes en tus dieciocho. Os quiere mucho, Alex.
-Tara:
¡Heeeeeeeeeey!Don't worry. Ya sabeis que esto no se termina aquí, que aunque vivamos lejos existen aviones y tal, y que si nos tenemos que ir a España nos vamos. Yo me voy mañana por la mañana temprano, aún me queda mucho día por delante sólo son las tres y media de la mediodía, el problema es que sólo estamos Justin y yo. Y no os preocupeís por la comunicación por que tenemos el whatsapp que hace mucho. Gracias por este verano chicas, os quiere con locura, Weasly*

Y ahí ya las cinco saben que todo ha terminado.Que están dentro del mes de Septiembre, que tendrán que volver a clase y que por mucho que intenta estar con en Miami nadie podrá conseguirlo, se faltan los unos a los otros. Aunque cómo dicen todas, esta no será la ultima vez que se vean antes del próximo verano.

[...]

Tara está en la cocina tomándose una coca-cola con un bocadillo porque le ha entrado el hambre por los nervios, sólo queda una hora y media para quedar con Justin y despedirse de él, el saldrá está noche hacia Nueva York. 
El timbre de la casa de Tara vuelve a sonar, y esta vez sabe que Alex no es porque está camino a su casa desde hace media hora. ¿Quien será?

-¿Chicos?¿Que hacéis aquí?
-Nosotros también nos vamos Weasly.
-¿Por qué habéis venido hasta aquí?Un mensaje hubiese valido y habría salido, estúpidos.
-Estábamos en el parque, y bueno nos pillaba de paso - dice John.
-Eso es - afirma Butler.
-¿Encima te quejas?No cambias Weasly - añade Somers.
-Tengamos la fiesta en paz Chaz. ¿Dónde está Harry?
-Harry se fue ayer.
-¿Cómo?
-Si, su abuela se puso peor y se tuvo que ir corriendo. Alex fue la única que se despidió de él - dice Nolan que acaba de llegar.
-Alex le verá, los dos viven en California.
-Si Tara.
-Bueno Tara, yo me voy ya que mis padres quieren salir en diez minutos. Espero que nos veamos pronto, y que quedemos todo - dice John con los ojos vidriosos.
-¿Lo dudas pequeño? Ven anda.
Y se abrazan. El abrazo más sincero de dos personas que se echaban de menos y se han vuelto a unir después de tantos años.
-Yo también me voy Tara, cuidate ¿si?
-Adiós Chaz, te quiero.
-Yo también pequeña.
Y ya sólo quedan Nolan, y Butler.
-Tari, yo me despido hasta el año que viene ya sabes, estudios y esas cosas.
-No exageres Nolan, a mí me pillas a nada, al igual que Justin y Roxx, Nueva York está a nada de Atlanta.
-Adiós pequeña skater.
-Adiós grandullón.
Y se abrazan.
El silencio se apodera de Butler y Tara. Tienen millones de cosas por decirse y aún no saben por donde empezar. Lo primero creo que es un 'Lo siento' seguido de un 'te voy a echar tanto de menos'. Uña y carne separadas por orgullo y prepotencia. ¿Hay algo que duela más que eso? Creo que no.

martes, 12 de febrero de 2013

Capitulo XIX




· Capitulo XIX

Tara cómo cada mañana apaga su despertado y se levanta de la cama de un impulso. Hoy vendrá el estudiante de intercambio, y dirán quien es el que se va de aquí. Está nerviosa, quizás es ella,quizás no.

Tara se mete en el cuarto de baño y mientras se quita la ropa deja que el agua comience a calentarse. Sólo son las ocho menos cuarto de la mañana y ya tiene mil y un pensamiento en su cabeza, no puede dejar de pensar ni de rayarse. Tienes ganas de ser ella para así poder ver a Justin, estarán en la misma ciudad. Lo que ella no sabe es que en un rincón de Nueva York su novio está cogiendo un avión para dirigirse hasta Atlanta dónde pasará su trimestre cómo becario. Es increíble, incluso irónico.

Tara se mete en la ducha y el agua comienza a caer por cada rincón de su cuerpo. A los dos minutos y medio sale de esta, y comienza a colocar su bandolera mientras se seca. Acto seguido Tara comienza a vestirse, pantalón pitillo vaquero oscuro, camiseta de manga corta básica negra y sus vans negras con los cordones amarillos al conjunto con su gorra. Está lista. Lista para comerse el mundo un día más a sonrisas.

· Narra Tara.

Mientras bajo las escaleras mi iphone comienza a vibrar. Cómo cada mañana supongo que será un mensaje suyo, y no me equivoco.

<<De estúpido>>

Te echo de menos. Quiero una dosis de tu besos ¡YA! Te amo pequeña. Por cierto, ¡BUENOS DÍAS, Idiota!.

<<Para estúpido>>

Te amo.

Cuatro toneladas de cemente encima mía. Su mensaje. Sus buenos días, aunque no son buenos días si no le tengo a él.
No sabe lo mucho que le echo de menos. Lo mucho que necesito su sonrisas. Lo mucho que necesito llegar a casa y que toda mi ropa huela a su colonia. Lo que necesito que me coma a besos. Lo que necesito sus ataques de cosquillas. Que me deje su sudadera cuándo hace frío. Que no me presione. Que esté ahí.
No sabe lo mucho que echo de menos salir de mi casa corriendo y encontrarmele a él, ahi sonriendo y sin camiseta y en pijama. Lo que echo de menos hacerme fotos con él en el espejo de su baño. Agarrarme de su mano cómo si no hubiese un mañana. Quedarme dormida con él y que me despierte cómo a una princesa. Sus besos en la frente. Sus buenos días cara a cara. Ponerse su gorras y que se enfade por que ami me queden mejor. Echo de menos decirle que le odio, echo de menos llamarle ''estúpido'' y que me sonrisa y me devuelva un ''idiota'' seguido de un beso. Que me coga al churchi y me de vueltas hasta que terminamos los dos en el suelo riendo. Que me cante al oído. Que me diga a cada segundo que pasamos juntos lo mucho que me quiere. 
No sabe que le necesito a él. Aquí, a mi lado y ahora.

Bajo las escaleras y aparco mi bandolera en la puerta y entro en la cocina. Son las ocho y cuarto, cogo dos tostadas y un zumo de brick y salgo camino al instituto. Hoy el director quiere vernos ami, a Mike, a Caroline y a Sarah en dirección antes de que empiecen las clases. ¿Que querrá?

· Narrador.

Tara sube las escaleras hasta dirección corriendo cómo si la vida se le fuese en ello, comiéndose a algunos niños de primero e incluso a gente de segundo de bachillerato cómo cada día llega tarde y lo peor de todo es que sus compañeros ya están metidos en el despacho. Esquiva dos niños mas y ya está allí.

LLama a la puerta con miedo de lo que pueda encontrarse, pero no es nada malo. Su hermano, su mejor amiga y Sarah la lista de la clase. 

-Señorita Weasly, llega tarde y su hermano lleva aquí cinco minutos.
- Lo siento Señor Parker.
-Tome asiento.

El director les empieza a contar los planes del intercambio y que ellos cuatro son los elegidos. Que la cosa no ha sido fácil de elegir pero que tiene la elección echa y creen que es la correcta, y todas esas cosas que se suelen decir. Es algo subrealista, cómo si estuviesen en un concurso pues igual y se estuvieran ganando nada más y nada menos que miles de dólares. 
Después de una media hora de charla ya que llegarán tarde a la primera hora si llegan el director les informa de que el estudiante que se va de intercambio es Sarah, Sarah Hunson. 
Y que el estudiante de intercambio se quedará en su casa. En casa de Sarah.

En la otra parte de Atlanta está Justin con sus maletas esperando a que alguien valla a recogerle, y al fondo ve a una chica rubia de ojos verdes claros con aparto de dientes y unas curvas bastantes definidas. Es la hermana de Sarah, es Clarise Hunson.
Justin se monta en el coche con Clarise y está la deja delante de la puerta del colegio dándole todas las instrucciones para llegar hasta la sala del director, y le dice que a la salida espere a Sarah que le tendrá que acompañar a casa por lo mens hoy. Justin se baja del coche y emprende camino.

Tara está sentada en las escaleras de la cafetería. No tienes ganas de entrar a clase para media hora que queda, y mucho menos después de que el director le haya pisado el sueño de poder ver a su novio casi todos los días, y vivir durante nueve meses bajo el mismo espacio que él, es decir en la misma ciudad. Aunque a la vez Tara se siente bien por quedarse aquí, no soporta separarse tanto tiempo de Caroline, sin ella se siente un poco vacía. Es irónico, cómo la vida de Tara, es cómo una montaña rusa de sentimientos.

[...]

-¿Vamos a clase o qué?
-Sí, antes tengo que pasar por la taquilla a coger los libros de filosofía.
-Vale, vamos.
-Carol.
-Si, Tara
-¿Quien será el estudiante?El director nos ha dicho que es chico.
-Yo sólo espero que no esté bueno, que tengo novio.
-Que estúpida eres.

Y las dos amigas comienza a carcajear de camino a la taquilla 143. 
El camino es corto debido a que se lo están pasando viendo imaginandose cómo puede ser el nuevo compañero Newyorkino, y cada una hace una apuesta. Tara apuesta porque será feo, y Carol dice que estará bueno y que tiene el presentimiento de que va a ser rubio. Tara está asustada por que la mayoría de presentimientos de Carol, se termirnan cumpliendo.

Han llegado a la taquilla, y Tara saca sus libros, pero hay algo que la impide ver cómo cerrar su taquilla y comienza a gritar el nombre de su mejor amiga cómo una loca, aunque una ráfaga de aire le hace oler el olor de su novio, y piensa que es su hermano que se ha comprado nueva colonia.

-Mike, ¿puedes quitar tus manos de mis ojos? Llego tarde a clase.
Y no obtiene respuesta.
-Mike Weasly.
Y sigue sin obtener respuesta. Un beso en el pelo del desconocido.Y hace que un escalofrío recorra su cuerpo.
-Mikel Javier Weasly, ya.
-¿Es mi nuevo nombre?
Por fin obtiene respuesta. No puede ser verdad, ese no puede ser su novio.
-¿Quien eres?
Ahora Tara siente miedo.
-El estudiante de intercambio.
-¿Cómo te llamas?
-No se. Pero he venido en busca de mi novia.
-¿Cómo se llama?
-Weasly.
-¿Justin?
-Sí, el mismo.

Y Justin quita la mano de los ojos de Tara dándole un tierno beso en los labios y susurrandole un 'cuánto te he echado de menos'.
No hay palabras. Se abrazan.Se besan. Se miran. Se vuelven a abrazar y así hasta que el timbre interrumpe su momento, su reencuentro.

-¿Y ahora?
-Espera.

Tara se acerca hasta dónde está su mejor amiga y se despide de ella.

-¿Que?
-Escapemos. Te he echado mucho de menos, cómo para meterme ahora a dar filosofía.
-¿Tanto me necesitas?
-Espera, ¿tu ami no? Podemos quedarnos.
-¿A que esperas para irnos?
-Venga, vamos.

Cierra su taquilla dejando allí su bandolera y coge sólo lo necesario. El móvil y las llaves de su casa. Está feliz y sabe que lo que está haciendo es una locura y más en un segundo de bachillerato. Está arriesgando su nota para entrar en una carrera pero a Tara eso es lo que menos le importa.
Saca el móvil de su bolsillo y manda un mensaje a su madre.

<<Para mamá>>

Mamá, Justin es el estudiante de intercambio, me he ido de clase. Voy a pasar el día con el, ahorrate la bronca para cuando llegue. Hoy el día es perfecto, te quiero.

<<De mamá>>

Estas realmente loca pero yo habría echo lo mismo. Pasarlo bien pequeña, y ten cuidado.

Guarda el móvil en su bolsillo y sonríe. No sabe dónde va a ir, ni por qué. Solo sabe que está metida en un autobús de camino a no sabe dónde con el chico de su vida, con su novio. Con el que tanto ha echado de menos, y con el que va a compartir nueve meses escolares, e incluso vacaciones.

-No sabía que eras tan ''loca''
-No me conoces bien.
Y le roba un beso. Sí es cierto, necesitaba una dosis de ellos.
-Si que te conozco Weasly.
Ahora es él quien le roba un beso a ella. 
Última para del autobús. El parque de los ''patos''. Así es cómo lo ha denominado ella, porque hay patos y los ancianos les dan de comer. Algo lógico.

Se bajan del autobús entre beso y beso y se agarran la mano y comienza a andar hasta llegar a un banco. Tara se siente feliz, está con el después de tanta lágrima.

-Bieber, bieber.
-¿Si?
-Mucho decirme que me amas por mensaje pero aún no te has atrevido a decírmelo a la cara.
-Te quiero.
-Eso no es te amo.
-¿Tú me amas Weasly?
-Yo te amo, Bieber

Y Justin le roba un beso, y otro beso más y otro más. Y otro más, y ahora comienza a hacerle cosquillas, y cómo ella echaba de menos está montada encima de él dando vuelta hasta caer al suelo. Sonríe aunque por su cabeza sigue pasando el que aún no le haya dicho te amo.

-¿Bieber me amas?
-Sí.
-¿Si me amas?
-Sí.

Y Justin se levanta del césped de dónde acaba de caer y comienza a correr por todo el parque gritando 'Estoy enamorado de Tara Weasly, y la amo' y así hasta el último metro cuadrado de aquel parque.
Dónde después obtiene su recompensa con una de las sonrisas más sinceras de Tara y una dosis más de besos.
Ahora sí se puede decir que han pasado de odiarse, a amarse. 


viernes, 8 de febrero de 2013

· Capitulo XVIII



· Capitulo XVIII.


· Narra Tara.

Son las siete de la mañana y en mi radio ya suena Diamonds de la diosa Rihanna.Toda la casa está revoluciada.Hoy es el primer día de clase después de las vacaciones de verano.Ya le echo de menos, no sé cómo pude enamorarme de él después de tanto odiarle. Fue algo raro. Demasiado raro diria yo. Tan raro que sigo afirmando que me enamoré con odio.
Este es mi último año en el instituto, segundo de bachillerato. Estoy deseando acabar y poder irme a Nueva York a estudiar fotografía, y así poder pasar con el los trescientos sesenta y cinco años del año.

-Pequeña, ¿cómo lo llevas?
-Cada día se hace más duro.
-No estúpida, digo que cuánto te queda.
-Diez minutos.
-Te espero abajo.
-Vale Mike.

Mike odia madrugar más que cualquier persona del mundo, su cama es su vida. Mike sigue en el instituto debido a que ha repetido este año, y tendré que aguantarle en clase además de casa aunque eso es lo que menos me importa ahora. Este verano nuestra relación ha vuelto a mejorar, es un peso menos de encima.

· Narrador.

Tara se lecanta de la cama y se coloca sus vaqueros pitillos azules cielo, con su camiseta negra básica, en los pies sus vans negras con los cordones a conjunto con el pantón y la gorra azul de obey. Ama esa gorra. En realidad Tara ama todas las gorras que tiene en su estantería del armario. Ella dice que sus gorras la definen incluso más que su propia forma de vestir.
Se coloca dos orquillas en el flequillo y su largo pelo moreno suelto, pero está indecisa asi que al final se decanta por una coleta alta. Se coloca su fular de color azul y se echa un poco de base para disimular sus ojeras. Estos últimos días no apenas ha dormido. Echa de menos estar con él y saber que al día siguiente podrá verle.
Un poco de su colonia favorita, el móvil y el reloj a conjunto con la ropa que lleva puesta y ya está lista.

Ha tardado diez minutos tal cómo le ha dicho a su hermano mayor. Baja las escaleras sin ganas sabiendo que al final no estará el cómo los dos ultimos meses que pasó en Miami, pero le queda el consuelo de que al final estará Caroline que ahora mismo es su mayor apoyo a demás de su hermano mayor, Mike.

-Buenos días mamá.
-Buenos días, hija.
-¿Que tal has dormido?
-Se puede decir que podría haber dormido mejor.
-En un mes te habrás acostumbrado Tara.
-Supongo mamá.

Coge una tostada y con desgarvo le da un muerdo y le pega un suerbo al zumo de piña que la ha dejado su madre encima de la mesa. Mira el reloj y cómo cada año el primer día de clase llega con la hora pegada un poco al culo. Es rutina según ella.

-Mike vamos o llegaremos tarde cómo de costumbre.
-Ya voy.

Los dos hermanos despiden a su madre con dos dulces besos en las mejillas y salen de casa hablando de mil y un tema. Sobre todo lo mucho que echan de menos a sus respectivas parejas de este verano. Mike, está pillado de Kels aunque su fachada no permite reconocerlo, y Tara salta a la vista que está enamorada de cada milimetro del cuerpo de Justin, cada milimetro de él y de su interior. Se siente vacía sin él.

-Ya hemos llegado.
-No me apetece entrar mis ganas son mínimas, Mike.
-¿Crees que amí si? A tí por lo menos estará esperandote Caroline, pero amí una panda de estúpidos.
-Tu los elegistes, Mike.
-No, ellos llegaron amí cuando las cosas no estaban bien entre tu y yo.
-Mike, en el fondo te quieren, no pasan sin tí, creeme.
-Supongo. Yo tampoco paso sin ellos, son mis estúpidos ¿no?

· Narra Tara.

'Estúpido' y mi hermano vuelve a recalcar esa palabra durante dos veces más en las conversación. Mil y un recuerdo viene a mi cabeza siempre que alguien dice esa palabra, siempre que alguien se dirigue amí de esa manera. 
Le echo tanto de menos. Echo de menos pasarme la tarde con él y llegar a casa oliendo a su colonia. Echo de menos montarme en esa moto que me despeinaba día a día. Echo de menos sus besos con sabor a menta. Sus abrazos interminables. Sus te quiero. Su sonrisa. Su mensaje de buenos días. Dormir con el a la luz de la luna. Las tardes de foto. Sus ganas de comerme a besos. Sus estúpidas sorpresas. Echo de menos que me llame idiota y poco después me robe un beso. Que me ''castigue'' cuando le vacilo haciendome cosquillas. Que me bese en la frente. Que me agarre de la mano. Echo de menos cuando salía a correr por la calle gritando 'Tara Weasly, te quiero'. Le echo de menos a él. Sus lunares incontables, echo de menos cada centimetro de su cuerpo. 

Es irónico nunca pensé que iba a echar de menos a alguien que me hizo la vida imposible durante el primer mes de verano. Es irónico que al final el terminase enamorado de mí y yo haya terminado más o menos igual. Es irónica la vida que me separa de lo que más necesito ahora mismo y me apega a lo que mas odio, es irónico echar de menos lo que un día echastes de más en tu vida. En sí, la vida es irónica. 

-¿Tara, me estabas escuchando?
-Sinceramente, no.
-Venga vamos para adentro.
-Si no queda más remedio, Mike.

Y me abraza. Me trasmite fuerzas y con ese abrazo me quiere decir, ''venga enana, que tú puedes con todo y con más''. 

· Narrador.

Tara y Mike después de un suspiro suben las escaleras hasta la puerta principal. Se sienten orgullosos porque es el primer día de clase y no han llegado cinco minutos antes. Aquello es una locura, la gente novata corre de un lado a otro buscando su clase. Por los pasillos puedes encontrarte con jóvenes comiendose a besos, amigos reencontrandose después de un largo verano, a lo que creeían que venia con la hora pegada al culo desayunando en la cafetería, a los profesores correr hasta la sala para tener su primera reunión cómo claustro, a los friquis enseñandose sus nuevos aparatos técnologicos, a la animadoras colocandose su traje, y a los chicos normales cómo somos Tara y Mike buscando a sus amigos correspondientes.

Al fondo está Caroline. La mejor amiga de Tara. Caroline no es muy alta pero tampoco es baja, tiene el pelo castaño un poco más abajo de la altura de los hombros, utiliza gafas de ver de tono gris oscuro, y su cuerpo es más o menos cómo el de una chica de diecisiete años. 
Tara y Caroline son dos personas completamente distintas. Dos personas con pensamientos contradictorios, sólo las une una cosa la música. Y haciendo música es cómo se conocieron cuando tenían siete años. En el coservatorio.
Desde aquel día son uña y carne, y dos en una.

-Mike, me voy que ya he encontrado a Carol.
-Vale pequeña.
-¿Nos vemos en el recreo?
-Sí.
-Te quiero.
-Y yo.

Y se despiden con dos dulces besos.
Todas las miradas están puestos en ellos. Todo el instituto sabía que Mike y Tara se ''odiaban'' y nadie entiende que ha pasado ahora. Muchos de los que están allí piensan ''Lo que hacen el verano'' y realmente razón nos les falta. El verano puede cambiar a una persona fisicamente pero también psicologicamente.

Tara corre pasillo alante hasta llegar a su mejor amiga. En realidad no está bien por que aún no ha recibido ningun mensaje de él, y eso la asusta, Justin también empieza hoy las clases pero ella ahora sólo piensa en llegar a su mejor amiga y comersela a besos después de haber estado tres meses sin verla, creo que tienen demasiadas cosas que contarse, aunque eso es obvio.

-Carol,carol.
Tara grita desesperadamente y aún le faltan unos veinte metros para llegar hasta ella. Su amiga se gira repentinamente y comieza a correr ella también.
Se funde en un sincero abrazo. Realmente se han echado mucho de menos.
-Estas 
-Estas
-Habla tú primero
-No tú.
-Venga Tara.
-Venga.
-¿Estoy?
-Preciosa tía.
Y coge a su amiga y la da una vuelta sobre sí misma.
-Tú no te quedas atrás, aunque sigues sin quitarte esa gorra.
-Dejemos el tema.
-Dios tía, enserio estás cambiada.
-Ya sabes, el verano cambia a la gente.
-¿Tanto?
-Estúpida.

Y siguen hablando hasta que llegan a su aula. Sin dudarlo Tara y Carol se sentarán juntas en clase cómo todos y cada uno de los años de su amitad.
''Aula 216, 2 de bachillerato A''. Todos los años la misma Aula, y todos los años la misma clase con la misma gente. 

Cuándo el timbre está apunto de sonar y Carol no se ha callado ni un momento desde que se ha encontrado con Tara el móvil de esta suena, es un mensaje de su chico, un mensaje de su estúpido.

<<De estúpido>>

¡Buenos días, princesa! Pasa un buen día y sobre todo que sea leve. Te echo mucho de menos, después de comer te llamo. Te amo. 

<<Para estúpido>>

¿¡Buenos días!? Creo que es algo irónico que me digas eso cuándo es el primer día de clase, me he dado un madrugón de tres pares de narices y te tengo a kilómetros. Tú también pasa un buen día, idiota. Esperaré tu llamada, no me falles. Te quiero mucho.

Y ahí termina la conversación. Tara está segura de que Justin habrá sonreído al leer su mensaje, al igual que lo ha echo ella al ver su mensaje de buenos días cómo todas y cada una de las mañanas. El timbre saca a Tara de sus pensamientos ''primer día de clase, allá vamos'' piensa ella.

[...]

El día ha pasado, y ha sido bastante ameno. En realidad no han echo nada debido a que la mitad de la clase aún no tiene los libros. No todo han sido malas noticias, habrá un intercambio con otros insitutos de los estados unidos, aún no sabemos que instituto serán pero seguro que uno de Nueva York cae seguro.

Tara no puede parar de pensar en que quizás el instituto de Justin esté dentro del intercambio y si es así solo desea que sea él el que venga desde allí, y ella no tenga que irse. El intercambio será durante los nueve meses de clases, excepcto vacaciones, en vacaciones cada alumno volverá a su casa y cuando empiezen las clases volverán a su instituto correspondiente de intercambio. Por eso, ella sólo espera que si es ella la que se va, no sea Justin el que venga, por que si es así, algo tiene seguro, tiene seguro que renunciaría a esa beca.

-¿En qué piensas Tara?
-En Justin.
-Siempre piensas en él.
-Carol, no lo entiendes.
-Ajá, si que lo entiendo. Ya sabes que yo cada día pienso en tu hermano.
-Carol.
-¿Qué?
-Eres una mentirosa. Sé que has ligado este verano.
-¿Sí?
Y las dos amigas comienzan a carcajear.
-Con mi novio, que por cierto viene por allí.

Tara se queda boquiabierta. Su mejor amiga está saliendo con Jason Evans. El pivón del instituto. No entiende nada. Su cara ahora mismo es un completo poema, y sólo piensa en que es una perra.

-¿Cómo?¿Cuándo?¿Por qué?
-Como es dificil de explicar, cuándo este verano y porque llevaba detrás mía un montón de tiempo Tara, tía.
-Dios, cómo me alegro. 
-Y tú vete a casa anda, seguro que tu hombre te llamará en nada.
-Gracias, eres la mejor.
-¿Nos vemos mañana?
-Obvio. Es sábado. Ya sabes estos cabrones y sus costumbre de empezar las clases un viernes.
-Tara, tu y tus indignaciones.
-Nos vemos cerebrito.
-Hasta mañana amante del monopatín.
-Te quiero mucho.
-Y yo Weasly.

Y pam 'Weasly' algo más que hace que todo le recuerde a él.
Nadie se imagina lo mucho que le necesita. Desde que se separaron siente cómo si le faltase el aire, o incluso el equilibrio cada vez que anda. Siente que las horas se hacen enternas, que los días no tienen sentido y cree que sonreír no merece la pena si él no puede verla. 
Desde que el no está a su lado cree que los abrazos no son sinceros, que los besos no saben ni trasmiten nada y que los te quiero quizás sean falsos. 
Siente que necesita que paren el mundo. Siente que necesita salir corriendo hasta él, en conclusión siente que le necesita a él para poder seguir viviendo.

[...]

Tara ya ha llegado a casa y para colmo la comida favorita de Justin está encima de su mesa, espagettis con nata y bacon ¿algo más? 
Se sienta en la mesa de mala gana, y sin a penas ganas se come aquel plato de espagettis si pronunciar palabra. Cuándo acaba, recoge su mochila del suelo y coge una manzana, acto seguido sube las escaleras.

-Mike.
-¿Si Tara?
-¿Dónde está mama?
-Ha dejado una nota que se iba a trabajar y que no volvia hasta la noche, igual que papá.
-Vale.
-Me voy a cambiar he quedado con estos para ir al cine.
-Yo me pondré el pijama, ya sabes mi nueva vida.
-¿Y Carol?
-Ha quedado con su novio.
-¿Su novio?
-Ajá, Jason Evans, nada más y nada menos.
-Ya era hora de que encotrase a alguien.
-Tú la rechazastes.
-Y no sabes cómo me arrepentí.
-Siempre has estado a tiempo de volver.
-Si no lo hize fue por tí.
-¿Cómo?
-Sé que si empezaba con ella te alejarías de tu mejor amiga, y no quería eso.
-Cómo le cuentes esto a Carol, me matará y me dejará de hablar se creería que es mi culpa.
-No lo haré, pero lo es.
-No Mike, yo madura y adulta y si su felicidad eras tú yo sabría comprenderlo.
-Lo siento.
-Adiós Mike.

Estás son las cosas que Tara odia de Mike, que le eche en cara que no hizo cosas por ella. 
Tara está descolocando su mochila cuándo empieza a sonar 'Domino' de Jessie J en su móvil, sabe que es el y corre a cogerlo.

-Idiota.
-Estúpido.
-¿Que tal el día?
-Me podría haber ido mejor ¿tú?
-Genial.
-Me alegro.
En realidad no se alegra. ¿Genial? Significa que no la ha echado de menos, que no ha pensado en ella, o eso es lo que ella cree.
-¿Y no sales?Es viernes.
-No, Carol ha quedado con su novio.
-¿Y tú?
-Debido a que mi novio está a kilometros no he podido quedar con él.
-Ajá, ¿y tú has quedado con tu novia?
-No, he quedado con mis amigos. Mi novia también está a kilometros de mí.
-Cómo te entiendo. Pásalo bien con tus amigos.
-Lo haré, aunque te echaré de menos.
-Eso espero.

Y le cuelga.
Sabe que se está comportando cómo una niña pequeña, y entiende que Justin tenga más vida a demás de ella, que ella está a kilometros. Está asustada y ahora más que nunca tiene miedo de perderle.
En Nueva York Justin está preparando su maleta y lo que Tara no sabe que ha quedado con sus amigos para despedirse de ellos, será el el estudiante de intercambio, será el quien se valla a su instituto durante los nueve meses escolares, sólo que pidió que nadie lo supiera que fuese sorpresa.
Lo que el no sabe es que quizás sea Tara la que se valla a su instituto, y el destino una vez más lo separe, todo estará por ver.

Tara coge el telefono y marca el número de Justin. Se siente mal.
Un tono, dos tontos, tres tono y por fín, al cuarto se lo coge.

-Me quedé sin batería.
-Que mal miente Weasly.
-Te echo tanto de menos, Bieber.
-Y yo, necesito una dosís de besos.
-Cuando te coga no te voy a soltar.
-Ni yo Weasly.
-Te amo.
-Y yo. Bebé, te tengo que dejar me están esperando estos. Te amo.
Nos vemos pronto.
-¿Cómo que nos vemos pronto?
-Te amo,te amo.

Y la cuelga.
Mil y un pensamientos pasan por la cabeza de Tara, pero nunca el de que Justin pueda ser el estudiante de intercambio.

sábado, 2 de febrero de 2013

· Capitulo XVII



· Capitulo XVII.

-Butler.
-Ah sí. Lo siento.
-No pasa nada.
-Tara, déjame hablar y no me cortes. Sé que hoy no es el día para decir estas cosas porque he tenido tres meses, pero no me he atrevido a decírtelo nunca, todo ha ido de buen rollo sin estas palabras de por medio, y sé que he sido un completo cabrón contigo, sé que no he tenido límites y que he sido demás de cabrón. Sólo quiero decirte antes de irme a Canadá, que lo siento por todo.
-Ryan.
-Es la primera vez que te escucho decir mi nombre desde hace un año y medio.
-Suena bien ¡eh! - carcajea Tara.
-Sí, demasiado bien.
-No te preocupes. Pasado pisado, ¿sí?
-Echo. Ahora me tengo que despedir, me espera un viaje largo.
-Cómo a todos, créeme. Nos pesa más el no volver a vernos en un tiempo, que las horas de viajes.
-Qué razón tiene. Espero que puedas seguir con Bieber, te quiere.
-Gracias Ryan. Cuídate ¿sí?
-Lo mismo.

Y Ryan sale de casa de Tara. Y ella siente que tiene que hacerlo, siente que tiene que abrazarle y decirle que le quiere, y que puede contar con ella para lo bueno y para lo malo.

-Hey, Ryan.
-¿Si?
-¿No me piensas dar un abrazo de despedida?
Y Ryan corre hacia ella, dándole un abrazo sincero. Ryan comienza a llorar, la echaba de menos.
-Te quiero Butler. Y recuerda que puedes contar conmigo.
-Lo mismo.

Y ahora sí. Tara ve cómo su amigo se aleja a lo lejos para coger camino hacia tierras Canadienses. Uno menos, sólo quedan ella y Justin.

[...]

Es la hora. Tara se acomoda su pelo y se coloca la gorra. Se echa un poco de colonia, y se repasa la raya del ojo y se echa un poco más de rímel. Coge las llaves, y el móvil. Lo necesario. No quiere más peso del que lleva ya. No por su cuerpo, si no por el dolor que tiene en el pecho de despedirse de él. Es lo que más le va a costar, además de la despedida con Alex.
Sólo tiene un pensamiento 'No llores, disfruta de las últimas horas'.
Por el otro lado está Justin, aunque cueste creerlo lleva llorando desde que Alex se ha pasado por su casa para despedirse. Esa morena de aparato le ha ayudado mucho estos meses, pero eso ahora no importa. Sólo importa que en menos de dos minutos, su novia esté llamando a su puerta para pasar la última tarde juntos.

-Hola idiota.
-Hola estúpida.
Y se besan. Un beso dulce pero apasionado, ambos piensan que quizás puede ser el último.
-¿Dónde vamos?
-¿Una de Starbucks?
-Sí.

Y Justin coge su chupa de cuero y sus llaves y cierra la puerta dejando su casa detrás de él.
Justin saca la moto del garaje, y Tara se sube con él, agarrándose fuerte a la cintura de este. Arrancan, dejando atrás el barrio. Su barrio. Y dirigiéndose hasta el centro comercial dónde pasarán la última tarde de sus veranos juntos.

[...]

Tras diez largos minutos ya han llegado. Justin aparca la moto, y agarrando de la mano a Tara la dirige hasta el centro comercial.

-¿Sabes que idiota?
-¿Qué estúpida? No leo las mentes, aún.
-Idiota.
-¿Que me iba a decir?
-Aún no tenemos ninguna foto juntos.
-Sí que tenemos Tara.
-¿Si?
-Sí.
-Bueno era una excusa, yo quería dedicar la tarde a hacernos fotos juntos. Ya sabes, cómo es la última.

-No pienses eso Tara. Vamos a tomar algo, y nos haremos fotos.
-¿Enserio?
-Sí.
-Te quiero.

Y se besan.
Se quieren pero no pueden estar juntos. El destino los une pero a la vez los separa. La vida juega con ellos cómo en un juego de azar, estás en lo más alto durante algunas partidas pero después ¡zas! lo pierdes todo y te quedas en el puesto más bajo.
Duele y hiere. Y lo peor es que esta herida tardará en cicatrizar.

Justin se acerca al mostrado y pide dos capuchinos con nata y caramelo. El café favorito de Tara, y con el que siempre se mancha y se deja un pequeño bigote blanco que produce demasiada risa a Justin, y eso a ella le encanta.
Ama verle sonreír pero más cuándo ella es el motivo. Cómo suelen decir, son cosas de enamorados.

Se sienta en la mesa junto al cristal. Desde ahí puedes ver a familias que vagan por el centro comercial de compras para la vuelta a la rutina, puedes ver a grupo de amigos que pasean por allí buscando algún hobby también ves a personas ancianas caminar y sentarse en un bar a tomarse algo, parejas de recién casados, y parejas jóvenes que se roban besos a cada tres pasos que dan. Parejas que no se separan porque viven en el mismo sitio, en el mismo lugar, bajo el mismo cielo, pero también bajo el mismo espacio. ¿Qué pasará con su relación? ¿Seguirán siendo uno?

-¿Vamos?
-¿Dónde?
-Al fin del mundo si tú quieres.
-Estúpido.
-Conozco un sitio perfecto dónde podemos ir.
-Te sigo.

Tara se monta en la moto de Justin, no sabe dónde va pero tampoco pone resistencia, se fía de él.
Tras diez minutos llegan al parque que hay detrás de sus casas. Un parque precioso, se bajan de la moto y juntos comienzan a correr por aquel césped de color verde chillón, y juntos se tiran en él.

-¿Por qué aquí?
-No sé, me gusta.
-Gracias.
-A ti, por existir.

Y comienza a echarse una foto tras de otra. En unas salen riendo, en otras salen besándose, en otras simplemente se miran, en otras salen haciendo el tonto, en otras corren, y en otras se muestran tristes porque ambos saben que está es la última tarde que pasarán juntos en Miami.

-Ala, ya son las siete y media.
-Contigo el tiempo se me pasa volando.
-Ojalá el tiempo fuese más despacio.
-Y ahora mismo estaríamos disfrutando juntos.
-El verano se ha esfumado.
-¿Sabes? Si pasa rápido es bueno, porque significa que te lo has pasado bien.
-En este caso es malo Justin, nos tendremos que separar.
-Créeme que no será por mucho tiempo, pequeña.
-Tomaré tu palabra.

Tara y Justin se abrazan. Lo tienen claro están hechos el uno para el otro. Aunque sus caminos se bifurquen y  se vean cada más pequeñitos, saben que estarán ahí el uno para el otro, y que ambos han prometido esperarse.

Es la hora. Son las nueve de la noche. Tara saldrá hacia Atlanta en una hora, y Justin también. Distintos destinos. Distinto aeropuertos. Distintas familias. Mismo sentimiento, nostalgia.

-Es la hora.
-Sí.
-Tara. Gracias, por estar ahí en los buenos momentos y en los malos, por aguantar tanto mis prepotencias cómo mis días de orgullo, por hacerme sonreír cuándo nadie más ha sido capaz, por tus abrazos, por tus besos, por tus te quiero, por tus ‘hasta el fin del mundo’, por ser cómo eres, por tu chulería.
Me has enseñado algo ¿sabes? Lo primero es que siempre en este mundo habrá alguien más chulo que tú, y lo segundo que las fachadas no son buenas. Gracias por poner mi vida patas arriba. Te amo Tara Weasly.
-Justin. No tengo palabras para ti, ya lo sabes todos. Día a día te he ido diciendo lo importante que eres para mí, y lo mucho que te quiero. No sé si podré vivir sin esos besos con sabor a menta. Sólo te pido una cosa, espérame. Te prometo que nadie ocupará tu lugar. Te echaré de menos Bieber.
-Te voy a esperar.
-Te quiero, mucho.

Y se besan. Enfrente de sus casas. Un beso sincero. Ellos están tristes y el cielo también. Comienza a llover. El otoño ha vuelto a Miami, y el invierno a sus corazones. Ambos se sienten fríos el uno, sin el otro.

[…]

Ya está todo listo en casa de los Weasly y de los Bieber. Las maletas están en los coches, la pequeña Jazzy está montada con Jaxon y Justin en el coche mientras Pattie y Jeremy terminan de colocar las últimas cosas y echan la llave a la casa.
Justo enfrente del coche de Justin está el de Tara. Ella ya se encuentra dentro mirando su cámara mientras derrama lágrimas, Mike que está a su lado la consuela con un triste abrazo. Ambos verán cómo se van de ahí, cómo se separan. Cómo dejaran de ser uno.
Los padres de Tara se montan en el coche siendo los últimos en despedirse de sus abuelos, los padres de Justin igual.
Tres,dos,uno..Ambos coche arrancan a la vez. Ahora sí, ahora ya no hay marcha atrás, dentro de nada uno estará en Nueva York, y otro en Atlanta.
Tara está en el avión cuando su móvil vibra de momento. Es un mensaje de él, es un mensaje de Justin.

<<De estúpido>>

Te he dejado un regalo en la maleta. Ayer mientras comías me colé en tu casa para dejarte algo que te recordase a mí. Y yo te cogí prestado un pañuelo, ese morado que tanto me gusta. Le llevaré siempre en la mano. No te olvides de mí, y espero que cumplas nuestra promesa. Hasta pronto, idiota.

<<Para estúpido>>

Estoy a diez minutos de mi casa. Cuándo llegue a casa te mando un mensaje ¿sí?
Confía en mí, lo cumpliré. Te quiero mucho, estúpido.


Y Tara por fin está en su casa. Sólo quiere ponerse sus cascos y dejar de pensar en todo por un momento, su cabeza va a estallar. No se lo puede creer, hace tan solo diez horas estaba abrazada a él, bajo aquel árbol, tumbadas en el césped verde del parque haciéndose mil y un fotos. Y ella se pregunta, ¿destino por qué eres tan hijo de puta?

Se levanta de la cama y abre la maleta corriendo. Y allí está el regalo, allí está la sudadera favorita de Justin, esa que el tanto adora. Y ahora es suya, está en su poder.

<<Para estúpido>>

Gracias. Me voy a dormir Justin. Pasa buena noche, sé que ya has llegado porque son las mismas horas. Hablamos mañana, te quiero mucho.

Y ahí termina su ‘relación’ veraniega. Y mañana empezará su rutina.
Una rutina, sin él.

viernes, 1 de febrero de 2013

· Capitulo XVI


· Capitulo XVI

Cómo cada mañana Tara se levanta de su cama, solo que hoy es un dia especial hoy es el último dia que pasará al lado de su novio, de su mejor amigo, de la persona que la ha dibujado todas esas sonrisas estos últimos meses.La persona que literalmente la a echo feliz. 
Hoy es un dia duro más duro que todos los demás. Hoy todo terminará, el verano acabará y con él su relación.

· Narra Tara.

El sol me está pegando en la cara de lleno, mi cara está caliente y juraría que también roja, empezamos bien el día. Me levanto de la cama y enciendo mi pequeña radio << I don't wanna miss thing >> de Aerosmith suena en la radio. Primer momento triste del día y todos los que me quedan. Cogo dos toallas limpias y entro al baño. Necesito despejarme, necesito relajarme antes de afrontarme al dia 'más' duro de mi vida, aunque seguro que los he tenido peores este está dentro del saco.

Enciendo el grifo de la ducha y dejo caer el agua mientrás se templa, al mismo tiempo yo me desprendo de mi pijama dejandole en el cesto de la ropa limpia que poco después mamá quitará. Es la rutina de siempre.
Entro en la ducha y dejo que el agua recaiga sobre mis hombros. Relajante.
Demasiado relajante. Ahora desde la ducha puedo escuchar cómo suena la canción de <<Let it be>> de The Beatles. Y de nuevo todos los momentos buenos golpean mi cabeza.
El primer beso, la primera discusión, el primer te quiero...

<<Flashback>>

-En esto también tenia razón Butler, tu gran caracter y tu tremendo tasero.
-Me das asco Bieber.
-Creeme terminarás amandome.
-Pierdete Bieber
-En tus sueños Weasly.

<<Fin del flashback>>.

No puedo evitar sonreír después de recordar aquel momento.Primer contacto visual, y primera conversación. Dos jóvenes desgradables. Me doy pena ahí misma amí, yo no soy así.. Justin es el único que hace que me ponga así de prepotente.
Y los recuerdos continuan.

<<Flashbach>>

-Intentemoslo.
-Creo que no va a salir nada bueno, somos dos chulos con dos ''cojones'' bien puestos Bieber.
-Weasly, si no arriesgas no ganas.
-Besame Bieber, pero hazlo ya. Quizás mañana me arrepienta.

<<Fin del flashback>>

<<Flashback>>

-Estas loco Justin.
-Loco por tí. Por tus besos y por tu holor a vainilla.
-¿Empezamos con un ''hasta que la distancia no separe''?
-No, empezamos con un para siempre Weasly.

<<Fin del flashback>>

<<Flashback>>

-Justin.
-¿Si?
-Te quiero, estúpido.
-Yo más, idiota.

<<Fin del flahback>>

<<Flashback>>

-Tara ¿sabes que?
-No soy adivina, ¿sabes?
-Estúpida.
-¿Que Justin?
-Desde que te conocí todo han sido continuos retos. A veces me da miedo pensar que contigo no me he superado a mi mismo..
-Justin, si tu reto era enamorarme, lo has conseguido. Me enamorastes con odio.
-Tú me has cambiado la vida, y me has cambiado amí.
-Tu, distes en mi vida todas las emociones que faltaban.
-Te echaré de menos.
-Creeme que yo a tí también.

<<Fin del flashback>>

<<Flashback>>

-Es raro Justin..
-¿El que?
-Antes de empezar a salir me dijistes que sólo me quería follar, y después de dos meses aun no he hemos echo nada, y me voy en dos días.
-Si, tienes razón. Una vez que empezé contigo no pensaba en eso, sólo pensaba en verte sonreír. No haberlo echo contigo es lo que menos me preocupa, ya tendremos tiempo.
-¿Y si no es así?
-Confia en mi pequeña, lo nuestro no terminará aquí.
-Te quiero.

<<Fin del flashback>>

Trescientos kilos de cemeto están encima mía. Las lágrimas de los ojos se me unen con el agua y no puedo notar la diferencia. Le voy a echar tanto de menos.
No sé que será de mi sin esos 'buenos días, estúpida' a través de papeles por las ventanas, o sin salir corriendo de mi habitación para encontrarme con él cada mañana, sin ese olor suyo a niño pequeño, sin sus besos de sabor menta, sin sus abrazos, sin su chulería, sin su fachada de malote cuando estamos todos juntos, sin sus te quiero, si sus 'quiero estar contigo el resto de mis días'.
No sé si podré sonreír sin que sea el el motivo, o no sé si podré vivir sin verle todos los días durante veinticuatro horas, no sé si podré mirar sus fotos sin derramar lágrimas, no sé si seré capaz de ser fuerte sin tenerle a él, o si seré capaz de levantarme cada mañana sin tener un motivo por el cual hacerlo.
Solo sé que le quiero, y que quiero estar con el resto de mis días..Que mi verano se resume en él, solamente en él, y también sé << que en esta vida, ya no quiero otros besos>>

Salgo de la ducha y de mis pensamientos, ni me habia coscado de que está sonando mi cancion favorita de Aerosmith <<Always>>.
Esta fue la primera canción que aprendí a tocar con la guitarra, y cómo acto reflejo descuelgo la guitarra y comienzo a tocar acordes a la misma vez que la radio lo hace, seguido de mi trozo preferido.

'' When I die you’ll be on my mind And I’ll love you always, always''. Y la canción termina ahí. 
Cogo mis vaqueros claros pitillos, y mis vans negras con los cordones verdes a juego. Mi camiseta verde de Mario Bross, y mi gorra obey. Todas mis gorras son obey. Esta es mi favorita, me la regaló Caroline cuando cumplí dieciseis años.
Y mi madre interrumpe mi sesión de guitarra.

-Tara, a comer.
-Mamá, no tengo mucha hambre.
-Tara, todo se supera en esta vida ¿sabes?. No puedes rendirte y dejar de luchar ahora, quizás todo esto no termina aquí.
-Hay kilometros de por medio.
-¿Enserio vas a dejar que un puñado de kilometros separe lo que el destino unió? Esta no es mi hija, la Tara que yo conozco lucha.
-Lucharé, pero hoy no tengo ganas.
-Venga baja a comer algo, la tarde será larga Tara.
-Y tanto mamá, y tanto.

[...]

El timbre de mi casa suena y por lo que noto que nadie abre la puerta estoy sóla en casa. Supongo que será Alex, ella se va hoy para su ciudad, ella vive en California. Todos estamos demasiado alejados los unos de los otros, pero esto no une, y creeme que Alex y no no dejaremos que los kilometros no separen.

-¿Tara?
-Ya va.
Y ahí está. Mi mejor amiga de 'vacaciones' desde que tengo tres años. Alex, Alexandra Payne.Loca, divertida y amiga de sus amigas. La que sufre de locuras, y la arquitecta de mis sonrísas. Nadie mejor que ella.
-Vengo a despedirme, ya sabes, en diez minutos me voy a California.
-Te voy a echar mucho de menos.
-Y yo a tí, bebé.
-¿Quedarás allí con Butler?
-¿En California?
-Sí.
-Llamadme.
-Prometido.
-Te espero en mis dieciocho.
-Prometido.
-Iré a verte pronto, te lo prometo.
-Te tomo la palabra. Y Llamame ¿vale?
-Haremos cómo cada año, cada mes llama una, empiezo yo.
-Te quiero mucho Tara Weasly.
-Yo más, Alexandra Payne.

Y ahí en aquel dulce y sincero abrazo no separamos dos almas gemelas que por culpa de la distancia no pueden estar juntas, pero siempre nos unirá algo. ''Miami''.

· Narrador.
Cuando Tara está cerrando la puerta su móvil comienza a vibrar, es un mensaje por el grupo de wa de las chicas. Son Roxana, Kelsey, Desirée, y Alex despidiendose.

*Conversación de wa de las 'Five for live'
-Roxana:
Chicas yo estoy de camino a Nueva York. He salido temprano y no quería despertaros.Gracias por este verano, tenemos que quedar pronto. Os voy a echar de menos. Os quiere, Roxx.
-Kelsey:
¡Aaaaamores míos! Yo también estoy de camino a California. Alex, ya te llamaré y quedaremos por allí algun dia tu, yo y Butler. Y a las demás nos vemos pronto, estoy de acuerdo con Roxx, tenemos que hacer una quedada todas. Os quiere mucho, Kels.
-Desirée:
Grandullonas, yo estoy ya para coger el avión de vuelta a España. Sé que conmigo no vais a poder quedar pero muchas gracias por este verano, yo ya echaba de menos que estuviesemos las cinco juntas. Sois increíbles.
Os quiere mucho, Desirée.
-Alex:
Trato echo Kels. Yo estoy montada en el cocha pasando por delante del skatepark, os podéis imaginar.Desirée, iremos a verte a España por eso no te preocupes, y a las demás espero veros pronto. Y a tí Tara, que te quiero mucho y esas cosas y que me esperes en tus dieciocho. Os quiere mucho, Alex.
-Tara:
¡Heeeeeeeeeey!Don't worry. Ya sabeis que esto no se termina aquí, que aunque vivamos lejos existen aviones y tal, y que si nos tenemos que ir a España nos vamos. Yo me voy mañana por la mañana temprano, aún me queda mucho día por delante sólo son las tres y media de la mediodía, el problema es que sólo estamos Justin y yo. Y no os preocupeís por la comunicación por que tenemos el whatsapp que hace mucho. Gracias por este verano chicas, os quiere con locura, Weasly*

Y ahí ya las cinco saben que todo ha terminado.Que están dentro del mes de Septiembre, que tendrán que volver a clase y que por mucho que intenta estar con en Miami nadie podrá conseguirlo, se faltan los unos a los otros. Aunque cómo dicen todas, esta no será la ultima vez que se vean antes del próximo verano.

[...]

Tara está en la cocina tomándose una coca-cola con un bocadillo porque le ha entrado el hambre por los nervios, sólo queda una hora y media para quedar con Justin y despedirse de él, el saldrá está noche hacia Nueva York. 
El timbre de la casa de Tara vuelve a sonar, y esta vez sabe que Alex no es porque está camino a su casa desde hace media hora. ¿Quien será?

-¿Chicos?¿Que hacéis aquí?
-Nosotros también nos vamos Weasly.
-¿Por qué habéis venido hasta aquí?Un mensaje hubiese valido y habría salido, estúpidos.
-Estábamos en el parque, y bueno nos pillaba de paso - dice John.
-Eso es - afirma Butler.
-¿Encima te quejas?No cambias Weasly - añade Somers.
-Tengamos la fiesta en paz Chaz. ¿Dónde está Harry?
-Harry se fue ayer.
-¿Cómo?
-Si, su abuela se puso peor y se tuvo que ir corriendo. Alex fue la única que se despidió de él - dice Nolan que acaba de llegar.
-Alex le verá, los dos viven en California.
-Si Tara.
-Bueno Tara, yo me voy ya que mis padres quieren salir en diez minutos. Espero que nos veamos pronto, y que quedemos todo - dice John con los ojos vidriosos.
-¿Lo dudas pequeño? Ven anda.
Y se abrazan. El abrazo más sincero de dos personas que se echaban de menos y se han vuelto a unir después de tantos años.
-Yo también me voy Tara, cuidate ¿si?
-Adiós Chaz, te quiero.
-Yo también pequeña.
Y ya sólo quedan Nolan, y Butler.
-Tari, yo me despido hasta el año que viene ya sabes, estudios y esas cosas.
-No exageres Nolan, a mí me pillas a nada, al igual que Justin y Roxx, Nueva York está a nada de Atlanta.
-Adiós pequeña skater.
-Adiós grandullón.
Y se abrazan.
El silencio se apodera de Butler y Tara. Tienen millones de cosas por decirse y aún no saben por donde empezar. Lo primero creo que es un 'Lo siento' seguido de un 'te voy a echar tanto de menos'. Uña y carne separadas por orgullo y prepotencia. ¿Hay algo que duela más que eso? Creo que no.